Hace un par de días me encontraba leyendo el libro sobre consejos de emprendedurismo, ya que es un tema que me apasiona.
Y pareciera que ahí encontré el clavo, el postre para el profesionista, para el experto, para aquel que es un profesional en su actividad económica.
Es cierto, nuestro país tiene una baja cultura financiera y no invertimos sabiamente, estamos acostumbrados a gastar todos nuestros ingresos, es decir, en el vivir solo el «hoy».
«Practica el diezmo educativo»
Ah caray, el concepto pareciera que tengo que dar un porcentaje de mis ingresos a las capacitadoras, instructores, escuelas, como si se tratará de un impuesto.
Si lo vemos friamente, tendríamos que decir la palabra invertir. Por lo tanto, gana dinero con ello, búscale que tu educación te genere una tasa de retorno, que mejore tu nivel de calidad de vida.
Pero siempre, concluye.
Cuando inicies algo, busca que tengas la opción de generar un documento que avale tus competencias laborales, y que sea como un elemento consolidador de tu proceso.
En nuestro país solo hay un poco más de tres millones de personas certificadas en competencias laborales. Es decir, que muchos aprenden en aula lo que quieren, tal vez hayan tenido buenas calificaciones o tal vez hayan tenido suerte en el examen, porque ese día estudiaron lo que iban a preguntar.
Otros aprenden con el hábito, es decir, a través de la repetición de secuencias, una y otra vez hasta que el cuerpo, la mente y nuestros instintos aprenden la inercia de las actividades.
Otros solo lo heredan. Este es un caso muy difícil, porque tienes que haber pasado por el habito pero en tu casa, que tu familia practique un conjunto de actitudes, hábitos y valores de manera cotidiana.
Tres millones, es muy poca gente en un país de 120 millones de habitantes. Solo un poco menos del 3% de personas que comprueban que tienen su experiencia avalada. Esto es bueno, ya que implica que mi campo de acción es hasta donde yo quiera llegar.
Te imaginas participar en un curso, que solo a ti te de la información y que con ello tu obtengas el diferenciador del mercado.
Te agradaría ganar más dinero. Mejorar tu nivel de calidad de vida.
Anímate, no te quedes ahí, inerte.
Hace unos días publicamos la rentabilidad de estudiar y las cifras no son muy alentadoras, hoy no solo basta con estudiar una licenciatura o una maestría. El mercado demanda más y mejores servicios.
A la orden.